La causa oculta detrás de los paros esporádicos en una línea de producción
Durante una visita, el cliente nos comentó que su línea tenía paros esporádicos sin razón aparente. No ocurrían siempre, pero sí lo suficiente como para afectar la producción y la eficiencia del turno.
Al revisar el tablero, notamos un detalle casi imperceptible: un pequeño parpadeo cada vez que arrancaba la línea. Ese tipo de señales no se ignoran; casi siempre apuntan a lo mismo: una mala conexión.
Inspeccionamos punto por punto y ahí estaba el problema.
El cable no estaba suelto, pero tampoco hacía buen contacto. Esa conexión mal asentada generaba microcortes, y esos microcortes eran los que detenían la operación sin dejar rastro claro.
Aseguramos la terminal, realizamos pruebas bajo carga y la línea volvió a trabajar estable.
Además dejamos una recomendación clave: revisar aprietes de forma periódica. Estos detalles, por pequeños que parezcan, son los que provocan la mayoría de los paros inesperados.
Aquí es donde realmente aportamos valor: no solo corregimos la falla del día, sino que prevenimos que vuelva a ocurrir. Eso es exactamente lo que los clientes buscan cuando nos llaman.


Comentarios
Publicar un comentario